Crónica de un día como tantos.

(actualización del título julio 19 de 2005).
Esto me sucedió hoy, y no es un arranque de furia, ni un ataque a una multinacional. Es un caso más de cómo ignoramos hasta lo que está en nuestra nariz y luego nos arrancamos las vestiduras culpando a otros. Espero que le sea útil a alguien (a alguien más que a mí.
Relato de los hechos, ahora algo más despojados de subjetividad:

Domingo.
Frío y destemplado.
Nfer, Cosme y el trío (hijo, esposa y nieto) aprovechan a descansar de tanto ajetreo citándose en el casi único lugar donde el peque puede jugar, distraernos un rato y comer algún bocadillo en medio de una muchedumbre familiar que busca lo mismo.
El "paseo de compras" del hipermercado "Pirulo & Co." (nombre ficticio pues no puedo aportar pruebas).

Comimos algo en el patio de comidas, templado y agradable.
En un momento recordamos que pronto es "el día del niño", invento argentino que hace que los familiares - a mediados de año -desembolsen enormes sumas, pues la publicidad asocia, ya saben, "niño feliz" a "juguete caro".

Por lo que me decido por un "Signos" conocido de antes como "Simón", simple disco con cuatro teclas que hay que pulsar y enciende una luz a la vez que emite una nota musical. Enemiga de juguetes que juegan solos, creo que es de los pocos que conjugan "tecnología moderna pedagógica" con creatividad y esfuerzo del niño.

Me decidí comprarlo hoy por la algo elevada suma de pesos 134,90 con 21% de iva incluido.
(Esta compra anticipada es por mi conocimiento que su valor es posible se triplique en la semana del "día del niño")
Al ir a la caja,por costumbre y porque lo manda la Ley y yo también soy infractora si no la solicito,le pido factura.
Me entregan un ticket.
Le digo a la cajera:
- "Perdón: factura, por favor" -
Cajera: "Ah, el ticket vale como factura".
Nfer:"esto no es lo que dice aquí ni lo que dice la ley".
C: "bueno pero es que la impresora de facturas no tiene tinta, nadie las pide..."
N: "no me importa. A mí me das una factura".(cartel grande a la entrada: no se aceptan cambios ni reclamos sin previa presentación de factura).
C: "bueno, aqui está su factura". (una factura - ticket, no una factura de "facturero", y de verdad...casi ilegible).
.........
La saga continúa.
Abuela Nfer decide olvidar el incidente, muy común según le han dicho, guardar el chisme en el coche y seguir con la tarde que promete...

Y ve que su nietito hace unos gestos que ¿quiere capturar con la cámara! ¡abuela al fin!, cuando alguien me detiene:una empleada del megamercado.
De modo tajante y cortándome el paso, me dice :
-"está prohibido tomar fotografías"
Nfer: "¿dónde lo dice?" (Nfer se lee todo, y entiende que la casa se reserva el derecho de admisión, por lo que si no le gusta, no entra. Sí respeto "no comer,beber ni fumar en el establecimiento, no ingresar con bolsos, etc, una larga lista que...termina con "es permitido ingresar con perros lazarillos". )
Empleada: "está prohibido filmar o tomar fotos por seguridad"
N: "¿dónde está escrito eso?"
E: llamando por el intercomunicador: "código XXX, seguridad aquí"
Nfer ve que la empleada se desvanece y una mujer del doble de tamaño que Cosme aparece a mi lado.
Nfer no se arredra y de buen talante le dice:
- "señorita, ¿podrá usted decirme dónde está escrito que no puedo tomar fotografías en el interior de este establecimiento?"
Empleada de Seguridad:"eh....pues..."
N: "perdone que insista, vengo seguido a este megamercado y leo todos los carteles, ¿dónde se me previene que estoy comentiendo una infracción?"
E. de S.: "Eh...la verdad, no lo dice. Además no prohíben los celulares, y todos vienen con cámara ...o sea no tiene sentido".
N: "gracias por entenderme. Dígame por favor dónde está el encargado de esta sucursal, que quiero hablar con él."
E. de S.: "está en Buenos Aires, señora."
N: (tratando de ser entre irónica y mantener la forma) "me queda a trasmano hoy...en fin: quiero el libro de quejas"
E.de S.:"no tenemos. Si quiere, hay un buzón donde puede escribir y dejar una sugerencia".
N: "perdón...creo que no me explico. Conozco mis derechos como consumidora y quiero dejarlos en claro"
E.de S.: "es que esos derechos no valen aquí, señora. Usted está pisando tierra americana"
N. (descompuesta de risa y de ira) "ah, ¿sí? ¿tierra de USA, quiere decir?"
E.de S.: por favor no me comprometa señora, aquí no tiene usted derechos: esto es como una embajada"
N.: (algo como chivada y buscando embarrar la cancha) "Magnífico. Mi embajador hablará por mí. Por otro lado si esto es USA deberá usted demostrar que está autorizada a portar el arma que tiene en la cintura".
E. de S.: .....................
N.: "decía usted, señora?"
E. de S.: "señora, nos están filmando. Tengo una familia que mantener. por favor, aquí no ha pasado nada, si?"
N: "En efecto. Aquí no ha pasado nada. No es su culpa. Es mía. Y esta cadena de superhipermercados ha perdido al menos un cliente, lo cual no le hará mella. Pero me queda claro que si nos va como nos va, es por no tener en claro que la culpa no es toda de los "de afuera" sino nuestra".
E. de S.: "Eh....hum....gracias y que tenga un buen día."
N.: gracias a usted, muy buenas tardes".

Fin.
No tengo pruebas.
Pero sí una sensación de alivio mezclado con culpa y vergüenza, ya que cositas así podrían ser evitadas por el ciudadano de a pie, y hacer por fin algo entre todos además de..quejarnos.
Y, carajos, porque necesitaba contárselo a ustedes.